viernes, 23 de marzo de 2012

Hoy

Hoy, 23 de Marzo, te invitamos a volver a compartir "La memoria del Tiempo". La cita es en el
Centro Cultural Recoleta, Junín 1930, a las 19:30hs.

Semana intensa, como pocas, por estas latitudes. Semana de evocaciones, conmemoraciones, actos y marchas. De ausencias y presencias. De emociones fuertes, intensas. De mirarnos y escucharnos.

Sumamos un ínfimo granito de arena. El nuestro. Si podés, vení. Te esperamos.

Mañana será otro día. No cualquiera.

.

sábado, 17 de marzo de 2012

Salió!

Ya tengo en mis manos el segundo número de la Revista "En el límite - Escritos sobre Arte y Tecnología" que estoy coordinando en el CEPSA - Centro de Estudios en Producción Sonora y Audiovisual de la Universidad Nacional de Lanús - Argentina.

Igual que el número anterior, las características de éste son:

1) Un tema que es abordado por los distintos autores desde diferentes perspectivas. En el caso de este segundo número el tema es "Interacción".

2) Además de artículos originales en castellano, nos propusimos también traducir artículos originales del inglés al castellano con el fin de ampliar la bibliografía disponible en nuestra lengua. En este número participan Fabián Beltramino, Sergi Jordá, Julio D´Escrivan, Rajmil Fischman, Jorge Sad, Petra Bachratá, Ricardo Dal Farra y Matías Romero Costas.

3) La publicación está disponible en dos formatos: papel y electrónico. La pueden descargar completa desde este link http://www.unla.edu.ar/public/en_el_Limite/index.php con una simple suscripción previa. También pueden descargar el número anterior por si no lo tienen.

Espero que la disfrutes, la leas, la releas y la recomiendes!

domingo, 22 de enero de 2012

Contra las telarañas de la costumbre

Por una de esas casualidades, me encontré con este prólogo que Julio Cortázar escribió para el libro Interrupciones I de Juan Gelman. Corría el año 1981. No corría. Pasaba lentamente y dolía el año 1981. Cómo dolía.

Quise probar algunas líneas antes de compartirlo con vos. Quise elegir algunos párrafos que me llegaron más hondo que otros. Pero no . Imposible. Va entero.

En los sitios http://www.juangelman.net/ y http://www.juangelman.com/wordpress/ tenés una gran cantidad de info y textos de Gelman. Vale la pena visitarlo aunque lo mejor son, por supuesto, sus libros.

Va Julio. Viene Julio. Siempre viene.

Juan Gelman ha querido que su libro se abriera con unas palabras mías, palabras de compatriota en el sentido más hondo, allí donde la noción de patria quiere decir tanto más que una pertenencia geográfica.Jamás un amigo me pidió algo tan difícil, jamás el afecto y la confianza de alguien muy querido me puso contra la pared como en este momento. Era preciso que Juan fuera Juan y que yo fuera Julio; era preciso que este libro viniera a golpearme en plena cara con su amarga y a la vez límpida fuerza; era preciso que su razón de ser contuviera todo eso que desde hace años vuelve cada noche en mis pesadillas y que en la vida diaria trato de denunciar y de atacar con mis pobres recursos de escritor. Quisiera decirlo ya, no estoy presentando a este libro de Juan, lo estoy simplemente acompañando yendole al lado como quiero seguir al lado de Juan en lo que nos queda de voz y de vida, para un día volver con Juan y con tantos otros compañeros a lo verdaderamente nuestro.


Tal vez lo mejor que puedo decirle al lector es que entre en estos poemas como se entra en un sendero, siguiéndolo en sus curvas y sus ascensos, deteniéndose allí donde el camino parece detenerse en las encrucijadas y reanudando la marcha como la reanuda cada poema desde el anterior. Un solo y único poema nace de todos ellos, el último ilumina el primero como el primero contiene el último, y cada uno es un paso en la continuidad de la ruta. Dejarse llevar por ella es ir ganando a cada página esa visión total que de pronto cristaliza transparentemente las etapas previas y la meta final. Pero de nada valdrá seguir la senda si no empezamos por quitarnos las telarañas de la costumbre, las obstinadas categorías de la convención. Aquí se ha hecho palabra la realidad más concreta de estos últimos años argentinos, y sin embargo esa realidad escapará a quienes apliquen a la lectura los códigos de la escritura política o los de la usual poesía combatiente, e incluso a quienes aceptan masivamente los criterios de la escritura corriente. Sólo leyendo abierto, dejando que el sentido entre por otras puertas que las de la armazón sintáctica o las manoseadas imágenes, metáforas o figuras más o menos arduas pero ya asimiladas a la tradición poética, sólo así se accederá a la realidad del poema, que es exacta y literalmente la realidad del horror, la muerte y también la esperanza en la Argentina de nuestros días. A todos nos sucederá lo mismo, la sorpresa ante las continuas transgresiones que se suceden a lo largo del camino, pero sólo quienes la asuman y de alguna manera las continúen merecerán un libro que quisiera contenerlos, contenernos a todos.

Ya sé que no es facíl. Quizás nos hemos habituado demasiado a que la poesía combatiente diga sin rodeos todo lo que tiene que decir, y que aunque lo diga bellamente, su ritmo sea el tradicional y sus palabras organicen dramática y líricamente la transmisión de un mensaje muchas veces superficial. Quizás estamos hoy confundiendo facilidad con eficacia, y no faltan quienes conviertan esto en una condición imperativa de la poesía de combate. Sí, no es fácil entrar desde la primera línea en un discurso que va de tal manera contra la corriente que incluso pisotea sin lástima las reglas más ahincadas de nuestra seguridad mental, de nuestras grillas prosódicas, de nuestra aceptación pasiva de las funciones gramaticales. Cuando Juan convierte el sustantivo dictadura en un verbo, la primera reacción en la lectura rápida es de sorpresa y casi de escándalo, se mira el verso como si estuviera afeado por una errata de imprenta, y de pronto se da el salto (cuando se lo da, que es lo que espero) y se descubre la riqueza de esa matáfora tan profundamente ligada con nuestra realidad en la que todo está dictaturado, en la que la noción de durar se vuelve insoportablemente manifiesta, en la que seguirán dictadurándonos mientras no aprendamos y apliquemos el infinito contralenguaje de la palabra y de la revolución. Y esto no es más que una instancia en la continua negación de lo aceptado y lo aceptable que da a la poesía de Juan Gelman su máxima capacidad de transmisión. Ahí donde lo masculino se vuelve femenino y viceversa para pisotear los cánones del pensamiento estereotipado, ahí donde sin vacilar se vuelven activas y operantes tantas palabras que manejamos pasivamente, el poema cesa de ser comunicación para volverse contacto, Juan y su lector cesan de estar solos y recorrer separadamente ese camino que busca llevarnos hacia nosostros mismos.

Hombre al que le han segado la familia, que ha visto morir o desaparecer los amigos más queridos, nadie ha podido matar en él la voluntad de subtender esa suma de horror como un contragolpe afirmativo, creador de nueva vida. Acaso lo más admirable en su poesía es su casi impensable ternura allí donde más se justificaría el paroxismo del rechazo y la denuncia, su invocación de tantas sombras desde una voz que sosiega y arrulla, una permanente caricia de palabras sobre tumbas ignotas. Cada diminutivo, cada nombre dicho como quien acuna o tranquiliza, hinca todavía más hondo la irrestañable denuncia de esas innúmeras muertes que tantos de nosotros llevamos como el albatros a todo cuello y sin saber volverlas del lado de la luz. También yo quise a Paco, a Rodolfo, a Haroldo, a tantos más, y sólo supe llorarlos; con Juan, por Juan, me acerco ahora a ellos de otro modo, el que ellos hubieran preferido.

Por eso tampoco debería desconcertar que aquí se sucedan interminablemente las interrogaciones frente al gran silencio en que se han sumido esas voces queridas. Juan pregunta, una pregunta sigue a la otra, hay poemas que son solamente preguntas. Siento que ahí, por encima del amor y la rebeldía que no se resignan al silencio, hay también una razón de ser que nos abarca a todos los que hoy empezamos tambien a interrogarnos sobre el destino que nos ha cercado, diezmado y dispersado en estos años. Cuando Juan pregunta se diría que nos está incitando a volvernos más lúcidamente hacia el pasado para después ser más lúcidos frente al futuro. No hemos sabido hacer las preguntas a tiempo, ésas que desnudan, que violan, que rasgan de arriba abajo las telas del conformismo y de la buena conciencia. No hemos sabido mirarnos en el espejo de nuestra verdadera realidad argentina; y si algo nos traen hoy los poemas de Juan Gelman es una actitud, una manera a la vez reflexiva instintiva de buscar lo que de veras somos sin las simplificaciones a veces suicidas que nos han arrojado tan lejos de lo nuestro.Esta actitud no necesita de gritos, de proclamas ni de denuestos; la fuerza más extrema de la palabra de Juan nace de haber dejado atrás la superficie del dolor y de la cólera para ahondar en sus raíces, en esa zona vital y mental desde donde la reflexión y la acción pueden recomenzar con una eficacia que tantas veces les faltó en medio del ruido y del furor. Volver positividad a la abominable suma del oprobio y de la desgracia: sí, todavía hay alquimias posibles cuando se posee el lugar y la formula como lo poseen hoy los poemas de Juan.

miércoles, 11 de enero de 2012

Charlando con Mesías Maiguashca

Seguimos con los diálogos, las conversaciones. En este caso con el compositor ecuatoriano Mesias Maiguashca, sin duda un referente de la música contemporánea en Latinoamerica aunque esté viviendo en Alemania desde hace muchos años.

Es interesante ver que algunas de las preguntas que le hice son las mismas que le había hecho a Jorge Antúnes, pero sus respuestas son totalmente diferentes, lo cual es mucho más enriquecedor para quienes los escuchamos.

Aquí te dejo el link de su sitio http://www.maiguashca.de/index.php/es desde donde podés escuchar muchas de sus obras.

Y pensar que no hace muchos años, como el mismo Mesías dice, era tan difícil escuchar y conocer la obra y el pensamiento de compositores latinoamericanos... Por suerte hoy no lo es tanto aunque queda mucho, mucho, por hacer.

Muchas gracias Mesías, por tu tiempo y generosidad!




domingo, 8 de enero de 2012

Charlando con Jorge Antunes

Jorge Antunes, uno de los pioneros de la música electroacústica en Brasil y en Latinoamérica, estuvo de visita hace unos cuantos meses por Buenos Aires, como invitado al Festival "La música en el Di Tella"

Nos pareció una buena oportunidad para charlar un poco con él y conocer sobre sus primeras experiencias en este medio, que es lo que movió a venir a Buenos Aires en los sesenta, que pasó después y unas cuantas cosas más. Si querés saber algo más sobre él, visitá su página web en http://www.jorgeantunes.com.br/

Y si tenés unos minutos, escuchá esta charla en donde hago un modesto debut como entrevistador. Ya me dirás...de algo hay que vivir, no?

Muchas gracias, Jorge, por tu tiempo y tus ganas de compartir tus experiencias con nosotros!



lunes, 17 de octubre de 2011

La memoria del tiempo

Poco a poco voy emergiendo, saliendo a la superficie después de unos meses de haber estado trabajando en la obra más grande que hice hasta ahora. La memoria del tiempo es una obra en cinco partes o cinco movimientos, dos audiovisuales, con videos de Nicolás Testoni, y los otros tres electroacústicos, acusmáticos, electromagnéticos o como quieras llamarlo.

La obra se estrena el 29 de Octubre, (falta muy poco!) en el Centro Nacional de la Música, México 654, y es un encargo de la Secretaría de Cultura de la Nación, encargo que me llena de alegría y orgullo, no sólo personalmente, sino porque no recuerdo otro momento en el país en que se hayan hechos tantos encargos de nueva música desde el Estado. Esperemos que siga el año que viene.

Las notas de programa, todavía en borrador, dicen más o menos así: Esta obra toma como punto de partida el concepto de memoria sonora. Por esto entiendo los recuerdos exclusivamente sonoros que vamos acumulando en los diferentes momentos de nuestra vida. Al igual que otros tipos de memoria, esta es tanto individual como colectiva, nos sorprende inesperadamente o es estimulada por algún hecho del presente. A su vez la vivencia del tiempo es individual, pero también se inscribe en un tiempo histórico, compartido con nuestros contemporáneos. De ese cruce de experiencias nace esta obra que toma como sonidos disparadores o inspiradores, los recuerdos sonoros de alguien que ha vivido toda una vida y, además, una gran parte de ella compartida conmigo: mi madre

¿Que más? Ojalá puedas venir a compartir este momento. Te espero.

lunes, 11 de julio de 2011

Algunas ideas para una segunda vuelta

Parecía imposible. Una locura. De hecho muchos lo daban por loco. Pero el tipo la tenía clara: las ideas bien puestas, unos huevos de acero y unos cuantos locos que lo seguían a muerte. Un tipo que creía en los sueños. No en el sueño del que se duerme en el Congreso. Creía en esos sueños que te mantienen vivo. Y se mandó. Cruzó Los Andes , llegó del otro lado y lucho junto a los hermanos chilenos. No voy a decir que venció porque eso es muy relativo. Hoy también.

Parecía imposible. El tipo había sido educado y especialmente preparado por el dictador Francisco Franco para continuar con su régimen que había durado nada menos que 40 años. Toda una estructura de poder armada y solidificada para continuar. Pero Juan Carlos se animó a hacer algo que nadie esperaba y empezó, junto con toda la sociedad española, a abrir un rumbo nuevo para su país.

Parecía imposible pero ocurrió en Portugal, en las presidenciales de 1986. Uno era Mario Soares, viejo líder socialista que había luchado contra la dictadura salazarista. Electo primer ministro en 1976, tras dos gestiones, en 1986 se presentó como candidato a la presidencia. La primera vuelta terminó con el conservador Amaral en primer lugar, con un 46,31% de los votos y Soares con un 25,43%. Casi 21 puntos. Parecia imposible. Pero el socialista hizo el milagro y el 16 de febrero duplicó el total de votos, mientras que Amaral apenas sumó dos puntos. El resultado final: 51,18 contra 48,82.

Parecía imposible ganarle elecciones al peronismo. Pero un tocayo con bigotitos no arrugó y fué para adelante. Rompió con las estructuras conservadoras de su partido y con el terror pos dictadura. No sólo ganó las elecciones sino que dió vuelta una página de la historia argentina. Nada que ver con el hijo, que hace todo lo contrario y así se le va.

No voy a decir "se puede". Me trae malos recuerdos. Pero creo que no hay imposibles si uno se juega. Si todos nos jugamos por lo que creemos. Y sobre todo si creemos que hay que cambiar la dirección que está tomando esta hermosa ciudad llamada Buenos Aires.

¿Y que quiere decir "jugarse"? No sé. Cada uno lo sabrá desde su lugar. Por mi parte no me voy a contentar con esta especie de militancia electrónica. Siento que tengo que salir a hablar con la gente.

No soy iluso. Es difícil, claro. Pero el imposible ya lo tenés. Mejor pelearla hasta el final. Dejemos que sean las ratas las que huyan cuando las cosas pintan mal.

Iba a decir que no soy nadie para dar ideas. Pero me acordé que dicen que negativo por negativo da positivo. Por tanto si no soy nadie, soy alguien. Alguien que escribe, balbucea y garabatea algunas ideas.

Por último, me atrevo a pedirles a nos representantes, con toda humildad: Querido Anibal, no hables. Quedate callado por tres semanas nada más. Si querés tocá la guitarra. Pero no hables. Hace la gran Bergman. Daniel, poné un poco más de garra. Si hace falta, unas clases de teatro con Norman Brisky no vendrían nada mal. Cristina, por favor, poné un poco el cuerpo. No hay mucho que perder a esta altura.

Si ya sé....parece imposible. ¿Pero quien te dice?

domingo, 19 de junio de 2011

Feliz día compadres

sábado, 18 de junio de 2011

La música en el Di Tella

No viví la época del Di Tella, pero siempre tuve una enorme curiosidad de saber como fueron esos días, esos años, en donde la música, y el arte en general, encontraron un lugar en Buenos Aires en donde crecer y desarrollarse. Y, sobre todo en una ciudad acostumbrada a mirar a Europa, que ese crecimiento haya sido compartido especialmente con colegas latinoamericanos que venían becados a estudiar, hace que toda esa experiencia haya sido única, casi irrepetible.


Por suerte estos tiempos que estamos viviendo apuntan más en la dirección de la reconstrucción que de la destrucción a la que estuvimos acostumbrados en las últimas décadas. Parte de esa reconstrucción es la de la historia. Sea política o artística. El Di Tella es parte de nuestra historia y este Festival que comenzó ayer, con la presencia de prácticamente todos los becarios, apunta en esa dirección: la reconstrucción de la memoria.

El poder hablar con ellos, conocer sus inquietudes y vivencias de aquellos años, saber que fue de sus vidas en los años que siguieron y escuchar sus obras, es un privilegio que tenemos hoy al alcance de la mano y que, sinceramente, no te podés perder.

Aquí podés ver toda la programación además de otras cosillas más. Va mi especial agradecimiento a José Luis Castiñeira de Dios, Micaela Gurevic, por la Secretaría de Cultura de la Nación y a Eduardo Kusnir, por haber hecho posible este momento.

lunes, 13 de junio de 2011

Abelardo Castillo

Lo mejor que se ha dicho sobre el cuento es lo que Edgar Poe escribió en su ensayo sobre Nathaniel Hawthorne. No pienso facilitarte las cosas reproduciéndolo. Tendrás que encontrarlo solo. Un escritor es un buscador de tesoros. Los descubre o no. Esa es la única diferencia entre la biblioteca de un escritor y el mueble del mismo nombre de las personas llamadas cultas.

No intentes ser original ni llamar la atención. Para conseguir eso no hace falta escribir cuentos o novelas, basta con salir desnudo a la calle.

Cuidado con las computadoras. Todo se ve tan prolijo que parece bien escrito.

Si la palabra mercado te hace pensar “persa”, quizá no seas muy original pero todavía estás a tiempo. Si la palabra mercado te hace pensar en la venta de tu libro, no insistas con la literatura.

No te dejes impresionar porque hayan existido Dante, Cervantes o Shakespeare. Todo ocurre siempre por primera vez; también tu libro.

No defiendas tu libro argumentando que los críticos son escritores frustrados. Lo verdaderamente peligroso de un crítico es que sea un crítico frustrado.

Tal vez seas envidioso, rencoroso, un poco estúpido, avaro, mal amigo. No te preocupes. Un buen libro siempre es mejor que la persona que lo escribe.

Un albañil puede habitar la casa que construye, decía más o menos Sartre, un sastre usar el traje que ha hecho: un escritor no puede ser lector de su propio libro. Un libro es lo que los lectores ponen en él. Ningún escritor puede agregar un sentido nuevo a sus propias palabras. Si puede hacerlo, debería escribir el libro otra vez.

Ser escritor. Mínimas.

sábado, 11 de junio de 2011

Lindo Chiche

El 16 de Diciembre de 1976, faltando apenas unos días para festejar la Navidad más negra que tuvo la Argentina, en medio de un salvaje e inimaginable genocidio, la revista Gente publicaba esta "Carta abierta a los padres argentinos".

Es interesante leerla y ver como era la propaganda de ese momento. Instalaron la idea de que el país estaba "en guerra" y ellos, los militares, actuaban con valor para salvar a la patria. Esa valentía se demostraba torturando hasta la muerte a miles de hombres y mujeres indefensos, saqueando y repartiendo el botín de guerra y robando bebés por poner algunos ejemplos. Además, como es lógico, pedían la colaboración de toda la sociedad (la complicidad, la delación) porque la guerra se libraba en todos las frentes. No hay que olvidarse que, como parte de esa "guerra", durante la dictadura la deuda externa pasó de 8.000 millones de dólares a 45.000, toda guita evadida con el consentimiento del Fmi y demás pilares de occidente.

Y también, la "guerra", estaba en la educación. Te rescato dos párrafos de esa carta. La amenaza del final es clarisima y no tiene ningún eufemismo ni metáfora.

"Después del 24 de marzo de 1976, usted sintió un alivio. Sintió que retornaba el orden. Que todo el cuerpo social enfermo recibía una transfusión de sangre salvadora. Bien. Pero ese optimismo por lo menos en exceso- también es peligroso. Porque un cuerpo gravemente enfermo necesita mucho tiempo para recuperarse, y mientras tanto los bacilos siguen su trabajo de destrucción. Hoy, aun cuando el fin de la guerra parece cercano, aun cuando el enemigo parece en retirada, todavía hay posiciones clave que no han podido ser recuperadas. Porque hay que entender algo, con claridad y para siempre. En esta guerra no sólo las armas son importantes. También los libros, la educación, los profesores. La guerrilla puede perder una o cien batallas, pero habrá ganado la guerra si consigue infiltrar su ideología en la escuela primaria, en la secundaria, en la universidad, en el club, en la iglesia. Ese es su objetivo principal. Y eso es lo que todavía puede conseguir. Sobre todo si usted, que tiene hijos, no está alerta.

Entienda algo y de una vez por todas. Esta guerra no es de los demás. También es suya. Si usted manda a su hijo a un colegio -religioso o laico- cumple apenas con una obligación civil. Eso no es lo más importante. Lo importante es que cumpla también con las leyes morales de su sociedad y de su cultura. ¿Cómo? No es tan difícil. Interésese por los libros que los profesores o los sacerdotes recomiendan a su hijo. Sea cauteloso ante las actividades escolares que no son estrictamente materias de promoción, como por ejemplo Catequesis o Moral. No mire con indiferencia o con absoluta conformidad otras actividades que se prestan a desviaciones: los campamentos, los encuentros de convivencia, los retiros espirituales, las visitas a villas miseria. Usted tiene una gran responsabilidad en esto. Porque usted no sabe -no puede saber- qué cara tiene el enemigo. O de qué se disfraza. Usted le entrega, le regala su hijo a la escuela durante muchas horas por día -a veces durante semanas enteras-, e ignora qué ocurre. Seguramente lo estarán educando como corresponde. Pero cabe la posibilidad de que no sea así. Y un día, cuando su hijo empieza a discutir con usted, cuestiona sus puntos de vista, habla de “brecha generacional”, afirma que todo lo que aprende en la escuela es bueno y todo lo que aprende en la casa es malo o está equivocado, ya es demasiado tarde. Su hijo está hipnotizado por el enemigo. Su mente es de otro. De allí a la tragedia hay un corto y rápido paso. Si eso ocurre y un día usted tiene que ir a la morgue a reconocer el cadáver de su hijo o de su hija, no puede culpar al destino o a la fatalidad. Porque usted pudo haberlo evitado."

Lindo, no? Lo curioso de esta carta es que es anónima. La firma "Un amigo". Pero todos sabemos que hay una norma no escrita que dice que las notas no firmadas son la editorial, la línea ideológica de esa publicación. ¿Y quien era el director de Gente en esos años? Nuestro amigo Chiche Gelblung, hoy periodista al servicio de un famoso medio de comunicación.

Aquí te dejo este link por si la querés leer entera. Por mi parte, con amigos así, prefiero cien años de soledad.

domingo, 29 de mayo de 2011

Jorge Rapp

No recuerdo exactamente cuando lo conocí a Jorge. Tengo la sensación que fue "hace mucho" y seguramente es así, aunque quizás me parezca mucho más de lo que realmente fue. Lo que si recuerdo es como poco a poco lo fui conociendo y como su presencia fue mutando de respeto a simpatía, de simpatía a afecto y de afecto a gran cariño.


Hay algo que recuerdo, que tengo bien presente y que, me parece, lo pinta de cuerpo entero. En un medio donde siempre hubo, y habrá, tantas vanidades y tanto ego, él siempre fue solidario y estuvo presente en cuanto concierto hubiera por ahí, por más que no hubiera en el programa una obra suya. Creo que estuvo en la mayor parte de las actividades que vengo organizando desde el año 2000 en adelante, siempre dispuesto a acercarse, junto a Judith, a conversar al final del concierto. a hablar, arreglar un encuentro o simplemente a saludar, a decirte "aquí estoy". Y, por supuesto, también estuvo en las actividades que organizaron otros colegas.

Su música merece otro tipo de comentario, quizás más detenido, quizás un poco más reflexivo de lo que te puedo transmitir ahora. Garabateando algunas líneas te diría que su música es siempre fresca, siempre sorprendente de una obra a otra y, lo más importante, siempre capaz de transmitirte emoción, de generarte un estímulo, ideas...una música movilizadora en el sentido profundo de la palabra.

En Junio de 2009, hicimos desde el CEIArtE el Simposio EMS09. Como entre las actividades iba a haber un concierto, no dudamos con Ricardo Dal Farra, en invitar a Jorge a que presentara una obra, la que él quisiera. Nunca nos imaginamos que esa iba a ser su última presentación en público.

Hoy, la tenemos para compartir. No es mucho lo que hay para ver y el audio podríamos haberlo mejorado mezclándolo con audio de línea. Pero preferimos dejarlo así, como si estuviéramos en la sala escuchando y viendo a Jorge, una vez más, haciendo sutiles retoques en la consola para darle espacialidad a su obra.

Va este pequeño homenaje para un gran compositor, una excelente persona y un querido amigo.

jueves, 26 de mayo de 2011

Mempo

Un día después de los festejos del bicentenario, el año 201, Mempo Giardinelli publica una nota que vale la pena leer y saborear, escrita casi desde el mismo lugar de la celebración en Resistencia, provincia de Chaco.

Te adelanto un párrafo

"Durante todo el acto yo pensaba, sobre todo, en nuestra democracia. ¿Qué hacía yo ahí, cuando hace sólo 30 años estaba en el exilio y este país era una carnicería? Y pensaba en mis amigos que odian a Cristina y al Gobierno. Yo me siento incapaz de odiar. Ni siquiera odié a los milicos durante la dictadura. Los enfrenté como medio país, pero no los odié. Es un sentimiento mediocre el odio. Degrada al que odia, más que al odiado. Y además, cosa curiosa, aquí los que odian son los ricos. Por algo será, me dije, aunque sé que la frase es lamentable. Pero es lo que sucede: los ricos más ricos son los que más odian. En el Chaco es así. En la Argentina toda"

Todo un tema el del odio, especialmente en la historia argentina. Pero la nota no se centra en eso. Yo tampoco. La podés leer completa desde aquí

sábado, 14 de mayo de 2011

Ecos de otro tiempo

Hoy, sábado 14 a las 19hs, estreno la obra "Ecos de otro tiempo" para cello y electroacústica. Esta obra me la pidió hace un tiempo mi amigo el cellista y compositor Ricardo de Armas, y hoy la va a estrenar él haciendo una interpretación que te caes de espalda.


El encuentro es en el Centro Cultural Recoleta, en el Festival Tsonami, evento que vienen haciendo contra viento y marea una banda de amigos y colegas que tienen tanta energía como buena onda.

Espero poder subir pronto algo de material, video o grabación para compartirla por si estás lejos o por si no podés venir. Si venís, por supuesto, mucho mejor!